Anís y German Junior

Llegamos a tiempo. Nos costó un poquito conciliar agendas, pero llegamos a tiempo por unos pocos días. Anís pudo lucir su barriga y su sonrisa. Se encontraba bien, fuerte y con ganas, así que el vientecillo, fresquito y la lluvia que despertó el día no pudieron con nosotros y como premio, a última hora de la mañana, nos dejó un día estupendo. Vale, al principio, algo de frío pasamos, pero en realidad, más a gusto que un arbusto. Y entre arbustos, arena y madera, os dejamos esta colección de fotos, que espero que la disfrutéis.