Los que me conocen saben que me pirran las embarazadas. Dicho así, puede sonra raro, o no…, pero si en general me encanta fotografiar mujeres, también niños, las que están embarazadas, con sus caras luminosas, los cuerpos que dicen «lo que llevo aquí», la ternura, la espera, el peso… son sesiones que disfruto especialmente.
En esta, además estuvimos acompañados de Pedro, el hermano «mayor» de Candela (la de dentro ;))
Un rato, un lugar apropiado y sesión de fotos hecha. ¿Te apetece una?